domingo, 31 de marzo de 2013

Tus manos, benditas tus manos.

Así corren las certezas,
entre tus labios y los míos.
De los besos que nos dimos
brotan suave ríos de esperanza.

Todas las ciudades me reciben con frío y rostros conocidos,
y de otras me despiden las miradas nostálgicas de quienes bien me aman.

Tuve una semana emotivamente intensa.
Verdaderamente ya es tiempo de dar gracias, respirar y volver.

sábado, 16 de marzo de 2013

AL CARAJO.

Vayanse al CARAJO.
Todos. Con cada una de sus culpas, de sus dedos indices apuntando, sus lenguas cascabeleando, con sus malas actitudes, sus falsos abrazos, su sed de ser victimas del mundo, con sus afectos baratos, sus lagrimas contenidas, su poco interes en el dolor de otros, con sus alegrias rotas.
Ya basta de sus cierres, de sus silencios, DE MIS SILENCIOS, de sostenerme, de limitarme, de no dejarme ir, de dejarme caer, de mirarme con ojos de "ay, pobrecita" y no hacer nada, de ignorar mis palabras, de no tomarme en cuenta, de hacerme un lado, basta de llamarme su segunda opcion.
Largate, dame un respiro, respeta mi espacio antes de que abra los ojos y decida sacarte a patadas de mi propio lugar, de mis ganas, de lo que quiero, porque es mi camino, es lo que busco, son mis errores, mis experiencias, mi dolor. Quiero disfrutar mi dolor sola, no necesito mas compania.
Vete lejos.
Necesito descansar.

jueves, 7 de marzo de 2013

Querer no basta.

Me aceptarás con mis dudas.
Te aceptaré con tus silencios.
Pero hace falta cambiar
para no perdernos el uno al otro.
Voy a pensar menos,
no dar tantos rodeos.
Intenta atender tus pensamientos,
permítete sentir más seguido.
Yo aquí voy a estar, sin dejar de quererte.



A mí me gusta lo que eres.
Me gustaría aún si cambiaras.


¿Y qué soy?
¿Quién soy para ti?
¿Qué tanto sabes de mí?

Suficiente como para saber que eres una persona que ha cambiado.

Mucho, quizás.
Varias veces.
Todo el tiempo.
Y a la vez me siento en el mismo lugar.


Por tonta. 
No te das cuenta de lo que eres. 
De lo que haces.

Mis ojos no pueden verme.

Porque siempre los haces llorar por no ver un jodido espejo.

domingo, 3 de marzo de 2013

Silencios desesperados.

Quiero detenerme a observar el paisaje, a respirar esa luz, pero el mundo me azota relojes contra el corazón que ya desganado se entrega a los torbellinos gritados de aquellos grandes perros negros.
Me contienen las paredes ladrando tristes y amargas notas hambrientas, sedientas, muertas.